En una revelación judicial sin precedentes, Tulio Duque, obispo emérito de Pereira, admitió que reintegró a un sacerdote con acusaciones de abuso sexual infantil, sin notificar a las autoridades. Tras la absolución del obispo, el clérigo abusó de otro menor.
Hemos hecho de lo difícil una virtud. Y como nos hemos acostumbrado a que solo lo difícil es bueno, ahora, para nosotros, lo realmente difícil es volver a lo fácil.